El home office, además de evitarte usar traje todos los días, es un modelo de trabajo que te puede ayudar a encontrar un equilibrio entre la vida personal y la profesional. Y, aunque todos queremos más tiempo libre y buscamos flexibilidad de horarios para ser dueños de nuestro tiempo, es difícil lograrlo cuando trabajamos en una empresa tradicional.

Pero no te preocupes, eso está cambiando. Algunas empresas están intentando mejorar su cultura organizacional, cambiar sus reglas y permitirles a sus empleados trabajar de manera remota. 

  • 1 de cada 4 compañías en el mundo ha adoptado el trabajo a distancia y se estima que esta práctica crezca hasta 90% en los próximos 6 años.
  • México ocupa el tercer lugar en Latinoamérica con el mayor número de personas que trabajan desde sus casas.

Pero, ¡cuidado!, que no es para todos. Cada trabajo y cada persona son diferentes y no todos podemos con el cambio. Hacer home office demanda autogestión y compromiso. Por eso, te recomiendo que antes de ponerte las pantuflas, tomes en cuenta lo siguiente:

  • Aunque vas a trabajar desde casa, tu cerebro necesita una rutina, así que levántate temprano, báñate y cambia la pijama por ropa que te permita sacudirte el sueño.
  • Escoge el lugar perfecto. No solo debes poner tu computadora en la sala, es necesario que establezcas un lugar ordenado, libre de distracciones y amueblado según las necesidades.
  • No es para todos. Evalúa (sinceramente) tus habilidades y herramientas para este estilo laboral. Por ejemplo, si amas el chacoteo de oficina, no vas a aguantar.
  • Despídete de todas las cosas que puedan ser distractores, evita estar pendiente de las redes sociales y de las solicitudes de casa.
  • Asegúrate de tener todos los recursos necesarios. De nada sirve estar en casa si tienes que salir al cibercafé para usar un escáner.
  • Establece horarios específicos en los cuales tú y tu empresa sepan que estarás disponible y en comunicación constante, respétalos y cumple con ellos sin ningún pretexto.
  • Si lo vas a implementar, que sea con un compromiso total, desde el día uno hazlo de la mejor manera; nada de “hoy en mi cama y mañana Dios dirá”.

Hay de trabajos a trabajos… Hay trabajos que se prestan más que otros para hacerlos de manera remota. Estos son algunos que le dicen sí al home office.

Redes sociales. Community managers o expertos en social media pueden hacer su trabajo desde cualquier lugar.

Periodista/escritor/ blogger. La capacidad de contar historias o relatar sucesos no se limita a un lugar. Los periodistas solo tendrían que salir a cubrir eventos o realizar entrevistas y hacer el resto en casa.

Diseñador gráfico. Como freelance puedes trabajar en proyectos creando imagen corporativa, ilustraciones, contenidos, etc., solo se necesitan los programas adecuados.

Desarrollador Web. Solo se requiere una computadora, algunos programas, acceso a los servidores, una conexión a internet estable… Y mucha paciencia.

Traductor. Este trabajo requiere altos niveles de concentración y largas jornadas de trabajo. La chamba se puede hacer desde cualquier lugar.

Modelador 3D y experto en CAD. En estos empleos relacionados con arquitectura y diseño industrial, aunque tengan que asistir a juntas para conocer los proyectos, no necesitan pasar el día en la oficina.

Contador. Si tienes una amplia cartera de clientes, debes reunirte con ellos en diferentes lugares; pero el resto del trabajo puedes hacerlo muy bien desde cualquier sitio.

Fuente: Agencia Sapiens

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.