Comunicación: los millonarios envían miles de emails todos los días y son especialistas en hacer llamadas telefónicas y conocer personas cara a cara. Cuanto más efectivo seas para dar a conocer tu mensaje, más personas querrán trabajar contigo. Tu nivel de comunicación determina la cantidad de tu riqueza.
Ventas: en este mundo vendes o te venden. De cualquier forma, debes elegir un camino. Si logras entender el proceso de ventas, una de las profesiones que más paga, conseguirás ser millonario. Aquellas personas que saben vender saben cómo mejorar la vida de los demás. Recuerda, todo lo que te rodea te ha sido vendido en algún momento.
Marketing y “brandeo”: tu reputación es tú mejor comercial. Promover tu persona y negocio es la piedra angular de la construcción de un imperio comercial. Decirle al mundo lo que haces de la manera más clara posible hará que te destaques en el mercado y llevará a tu negocio a lugares insospechados. Todo millonario tiene una buena marca.
Inteligencia emocional: si puedes cuidar de ti mismo, puedes cuidar de los demás. Conocer y dominar la naturaleza humana es la clave del éxito. Los millonarios entienden de motivación, lenguaje corporal, tono de voz, tacto, diplomacia, empatía y todo lo relacionado con la inteligencia emocional. La mayoría de estas cosas se pueden aprender con solo prestar atención a las personas que te rodean. Recuerda lo que Theodore Roosevelt decía: “A las personas no les interesa cuánto sabes, sino cuánto te interesan”.
Innovación en productos y servicios: cada millonario debe ser creativo y saber “darle la vuelta” a las ofertas del mercado. Ray Kroc, fundador de McDonald’s, no inventó la hamburguesa, pero sí fue capaz de innovar el servicio de la comida rápida.
Organización: cada millonario tiene un sistema que le funciona. Son bien organizados pero flexibles para adaptarse a su medio. Cada decisión de negocios que hagas deberá estar basada en la información que seas capaz de recolectar de manera rápida y eficiente.
Filantropía: los millonarios entienden que el secreto de una vida plena está en el dar. Muchas personas con amplias riquezas apoyan causas constantemente. Saben que solo pueden ser ricos cuando ayudan a otros. Entienden que no se trata de dar cheques a “diestra y siniestra”, sino de participar en las buenas acciones de manera integral.
Liderazgo: cada millonario es un líder. Entienden que deben seguir a grandes personas para poder ser dirigentes ellos mismos. Saben que tienen que ser personas responsables y con iniciativa cuando se dan situaciones difíciles. Entienden que la mejor manera de superar los tiempos de crisis es contar con un gran equipo y que para ello, hay que ser un líder que inspire.
Fuente: Agencia Sapiens