Autoridades de salud advierten sobre el riesgo de agotamiento por calor y golpe de calor en niños y jóvenes, trastornos ocasionados por la exposición prolongada a condiciones climáticas extremas y el esfuerzo físico intenso en ambientes calurosos.

¿Qué son el agotamiento por calor y el golpe de calor? El agotamiento por calor y el golpe de calor son condiciones que resultan del aumento de la temperatura corporal debido a la exposición prolongada al calor y la humedad. El golpe de calor, en particular, es una forma grave de lesión por calor en la cual la temperatura del cuerpo alcanza los 40°C o más.

¿Cuáles son los síntomas? Es fundamental reconocer los síntomas para tomar medidas preventivas. El agotamiento por calor se manifiesta con sudoración excesiva, piel pálida, sensación de calor sofocante, sed intensa, calambres musculares y debilidad. Por otro lado, el golpe de calor se caracteriza por una temperatura corporal elevada, piel roja y seca, respiración acelerada, dolor de cabeza intenso y alteraciones en el estado mental.

¿Quiénes son los más vulnerables? Los niños menores de 5 años, especialmente los menores de 1 año, así como aquellos con enfermedades crónicas, fiebre, obesidad o quemaduras solares, son más susceptibles al golpe de calor.

¿Cómo prevenirlo? Se recomienda mantener una adecuada hidratación, evitar la exposición prolongada al sol durante las horas más calurosas del día, vestir ropa ligera y holgada, y reducir la actividad física en climas cálidos. Además, es importante permanecer en lugares bien ventilados y frescos y evitar dejar a los niños dentro de vehículos estacionados.

¿Cómo actuar si ocurre? Ante síntomas de agotamiento por calor, se debe trasladar al niño a un lugar fresco, desvestirlo y ofrecerle agua. En caso de golpe de calor, se recomienda buscar ayuda médica de inmediato, enfriar el cuerpo con agua fría y mantener al niño hidratado.

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.