Título: El Tren Maya: Pilar de Justicia Social y Motor de Desarrollo Regional

En una declaración que ha captado la atención nacional, la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa, delineó en la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador el papel crucial del Tren Maya como un instrumento de justicia social y prosperidad compartida. Este ambicioso proyecto, que está transformando el sureste mexicano, representa una inversión histórica que no solo está remodelando la infraestructura regional, sino también empoderando a comunidades previamente marginadas.

Durante su intervención, Lezama destacó la magnitud del impacto económico y social que ha generado el Tren Maya. “Con más de 44 mil 370 empleos directos y aproximadamente 18 mil 409 empleos indirectos, el Tren Maya ha sido un motor de crecimiento para Quintana Roo,” declaró la gobernadora. Esta cifra significativa subraya el impacto positivo en la generación de empleo y el desarrollo económico regional.

El proyecto, que cuenta con una inversión sin precedentes cercana a los 200 mil millones de pesos, es presentado por Lezama como un testimonio del compromiso con la Cuarta Transformación y una señal clara del compromiso del presidente López Obrador con el desarrollo equitativo. “El Tren Maya es mucho más que un sistema de transporte; es una declaración de inclusión y justicia para un sureste que durante mucho tiempo ha estado olvidado,” afirmó.

Uno de los aspectos destacados de la intervención de Lezama fue el tramo 4 del Tren Maya, que conecta Izamal en Yucatán con Cancún en Quintana Roo. Este tramo de 239 kilómetros de vía doble electrificada, que cruza puntos turísticos de renombre como Chichén Itzá y Valladolid, está configurado para transformar el acceso y el flujo económico en las comunidades que antes estaban desvinculadas del auge turístico de Cancún. “Estamos integrando comunidades como Nuevo Xcán y Leona Vicario en el circuito turístico, llevando con ello la prosperidad a áreas históricamente marginadas,” añadió Lezama.

Además del impacto económico directo, la gobernadora presentó una serie de proyectos complementarios que se están llevando a cabo en paralelo con la construcción del Tren Maya. Se destacan la construcción de dos nuevos almacenes de combustible de Pemex en Cancún y Chetumal, que incrementarán la capacidad de almacenamiento en la región casi seis veces, y la potencial extensión del gasoducto Mayakán hasta Quintana Roo, en colaboración con la Secretaría de Energía y la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Estos proyectos subrayan un esfuerzo por potenciar la infraestructura energética y mejorar la competitividad empresarial en la región.

En un compromiso adicional con la preservación del patrimonio cultural, Lezama anunció la creación de un centro de investigación para el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la zona de San Miguelito, Cancún. Este centro se encargará de la investigación y conservación de piezas arqueológicas, reafirmando el compromiso del Tren Maya con la protección y promoción del rico patrimonio cultural de la región.

En resumen, el Tren Maya emerge no solo como un proyecto de infraestructura, sino como un faro de justicia social y desarrollo inclusivo. Mara Lezama lo describe como un “Tren de la Justicia Social” y sus vías como “Las Vías de la Transformación”, encapsulando la esencia de un esfuerzo monumental que busca conectar, empoderar y transformar a una región históricamente desatendida. Mientras el Tren Maya avanza, su impacto promete ser una fuerza decisiva para la equidad y el progreso en el sureste mexicano.

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *