Londres tiene una nueva atracción turística, pues ahora se ha inaugurado una piscina de lo más peculiar, instalada entre dos edificios y seguramente no recomendada para quienes sufran de fobia a las alturas.

La Sky Pool es la nueva atracción para los amantes de la adrenalina. Se trata de una piscina instalada entre dos edificios a 35 metros de altura.

Desarrollada por HAL Architects, se trata de un proyecto que lleva concretándose desde 2015. La alberca cuenta con todas las medidas de seguridad, conteniendo en su interior alrededor de 148.000 litros de agua.

Hecha en una sola pieza de acrílico, con un grosor de 35 centímetros, la Sky Pool está hecha para aguantar toda esa cantidad de agua, y las personas en su interior.

Evidentemente la piscina no solo debe soportar eso, también debe aguantar los embates del viento y las vibraciones de los edificios, por lo que un marco de acero que se encuentra en las esquinas de esta la ayudan a pasar sin problemas al clima mismo.

¿Nadarías ahí?

Fuente: Agencia Sapiens