Aneece Malik, un hombre de 32 años, de Whitefield, Manchester, los filtros supusieron un salvavidas para sentirse cómodo a la hora de publicar fotografías suyas en redes sociales.

Dijo que nunca recibió atención cuando estaba fuera de casa y que estaba tan descontento con su apariencia que decidió transformar por completo su rostro.

Aneece asegura que someterse a los retoques de labios, cejas, mandíbula, barbilla y mejillas le han ayudado a tener un mejor aspecto, «mejor» que muchos de los filtros que usaba antes.

El hombre, que ahora vive en Antalya, Turquía, ha invertido 130 mil libras, 180 mil 390 dólares aproximadamente, en los retoques, algunos de los cuales tiene que seguir haciéndose cada dos meses, como es el caso de las inyecciones antiarrugas.

Fuente: Agencia Sapiens

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *